Y esta nueva temporada de estrenos televisivos lo está demostrando, tanto en España como en EE.UU.

Lo hemos visto con el batacazo que se ha dado Ana Obregón en Antena 3 con su nueva serie, muy publicitada y avalada por los éxitos anteriores conseguidos por la actriz, independientemente de la calidad de los productos estrenados.

Y también lo estamos viendo en EE.UU., donde la serie más publicitada durante el verano, la gran promesa de la cadena NBC, la nueva de Aaron Sorkin, Studio 60 on the Sunset Strip, está siendo un gran fracaso de audiencia, alcanzando tan solo un 8% de share en su último episodio frente al excelente resultado de otra serie como Heroes, que con un 13% (recordemos que en EE.UU. las audiencias están más fragmentadas y no hay que llegar al 20% para sobrevivir) está siendo la revelación de la temporada en la misma cadena.

Personalmente no me extraña que Heroes esté funcionando ¡que pedazo de serie! de lo mejorcito que he visto en mucho tiempo. El guión es espléndido, yendo mucho más allá de la pura historia de unos hombres con poderes extraordinarios, que es lo que podría parecer en un principio. De hecho, más que una historia de ciencia ficción, que es lo que podría parecer partiendo de esta base argumental, la serie está girando hacia el análisis entre el bien y el mal y lo cerca que están uno del otro, ls personajes empiezan a disfrutar de sus posibilidades en formas que no se habían planteado antes y esa dualidad abre nuevas posibilidades a un guión que no sabía muy bien por donde iba a tirar, sin duda excelente.

Y respecto a Studio 60, pues la verdad es que a mi tampoco me está enganchando, creo que ya lo comenté la semana pasada. No le auguro una temporada completa o al menos no una segunda temporada.