Tremenda reflexión la que TV Addict hace a propósito de la cancelación de Vanished, planteándose cómo esto puede afectar al futuro de la audiencia de nuevas series con la misma estructura: un misterio central que abarca toda la serie y que no se resuelve hasta el final.
El planteamiento es claro: si el espectador no tiene garantía alguna de que la intriga que en él se genera con los primeros episodios va a quedar satisfecha con una respuesta al final de la temporada ¿por qué invertir sus horas de ocio en una serie así? Mucho mejor buscar otro tipo de producto con historias cortas que garanticen resoluciones en el mismo espisodio y evitar disgustos innecesarios.
Pues en concreto con esta serie, sí.
He pasado grandes momentos con ella, y aunque es una pena quedarse con la intriga, no me arrepiento en absoluto de haberla seguido.
Un saludo.