El año pasado comentaba que el paso dado por el Festival de Islantilla para reinventarse y pasar de ser un festival más de cine a ser uno de televisión, era algo verdaderamente importante y sobre todo necesario, para un sector que mueve gran cantidad de dinero y profesionales y que goza de una extraordinaria salud.
El de Islantilla fue el primer movimiento en este sentido, pero hoy leo que 2009 nos traerá otro Festival de Televisión de la mano de un reconocido Festival de Cine, la Seminci de Valladolid. En este caso no es una sustitución, sino una sección paralela, que servirá para que cadenas, productoras y profesionales sigan viendo reconocido su trabajo en el sector.