A pesar de las muchas expectativas que había generado el reality de Ana Obregón en DKiss, un cúmulo de circunstancias han hecho que el programa tenga unas audiencias muy bajas, incluso por debajo de la ya baja media de la cadena (baja porque es un canal muy nuevo y porque su programación aún no está en la mente del espectador, cuestión fundamental que podría haber tenido un punto de inflexión con este programa).
Que Ana Obregón es un buen reclamo para una determinada audiencia española puede resultar añejo, pero no sorprendente, toda vez que la presencia de Anita en cualquier evento es carne de revista, titulares y polémicas en no pocas ocasiones, un filón para los programas del corazón y hasta un acierto en series y programas de entretenimiento. No vamos a entrar en los motivos de esta solvencia del personaje, pero no podemos negarlos.
El estreno de Algo pasa con Ana coincidía en emisión con el regreso de los triunfitos, un programa que ha generado la máxima expectación entre la audiencia y que, pese a no coincidir exactamente en el tiempo (se emitía una hora más tarde) ya era trending topic desde mucho antes, generando conversación y ansiedad a partes iguales entre cuatro millones de espectadores que no estaban para otra cosa, que no se iban a distraer con Ana. Un grueso de la audiencia que además es la que genera movimiento y conversación en redes sociales, recordando a los demás qué se emite y por qué merece la pena verlo, haciendo chistes, viralizando memes y alimentando así un programa destinado a funcionar, tanto en su emisión tradicional como en estas otras medidas de interés y éxito que son las redes sociales.
Sobre los realities tipo Algo pasa con Ana, parece que también han funcionado relativamente bien, desde el de Alaska y Mario en sus tres temporadas en MTV, sin duda el más exitoso, hasta el de Tamara Falcó que, sin grandes datos en su emisión en directo, tuvo unos resultados sorprendentemente buenos en su consumo online. Y es aquí donde posiblemente DKiss haya tropezado con la realidad, una que en pleno 2016 no puede dar la espalda a la forma de consumir contenidos de una buena parte de la audiencia, que ya no está pendiente de horarios y parrillas, una que da por sentado que todo lo que no puede ver en el momento estará disponible después… o no.
Algo pasa con Ana podría haber triunfado de emitirse un domingo cualquiera, con una programación más floja (recordemos que en La Sexta se emitía Astral, una entrega de Salvados muy especial y dura, muy anunciada y comentada, aunque tengo mis serias dudas de que los espectadores de este programa tengan cabida en las reflexiones sobre audiencias del programa de OT y Ana Obregón-no digo que no sean los mismos en un momento dado, pero no a efectos de comportamiento un domingo noche). Pero Algo pasa con Ana chocó de bruces con OT, El Reencuentro, una piedra en un camino que podían haber sorteado antes, una vez se conoció este coincidencia, una piedra que podría salvarse en cualquier momento si el programa estuviera disponible para su consumo online, en la propia web de la cadena, donde solo podemos acceder a algunos clips, no al programa completo. He intentado contactar con ellos a través de Twitter para que me confirmen que, efectivamente, no se puede ver online (no vaya a ser que esté y yo no lo haya encontrado) pero no he recibido respuesta.
Somos muchos los que no vimos el reality el domingo pero querríamos verlo después, muchos que asumimos que estaría disponible en alguna parte, muchos los que nos hemos sentido defraudados al no encontrarlo después y muchos los que, al ver los resultados de audiencia, no entendemos cómo es posible que no se apueste por un consumo en diferido cuando las circunstancias no acompañan, cuando se trata de un canal tan desconocido, cuando todo ha cambiado tanto que muchos damos por sentado ese acceso a los contenidos en cualquier momento y en cualquier lugar. DKiss pierde una gran oportunidad, nosotros nos perdemos el reality de Ana… en la balanza, tengo claro quién sale perdiendo.