• Inicio
  • Clipping
  • Concursos
  • Contacto
  • Suscripción

 
  • TVE
  • LA2
  • Antena 3
  • Cuatro
  • Telecinco
  • La Sexta
  • Estrenos

Let me be your star

Fecha de Publicación: 25 octubre 2013 - 15:19   |   6 Comentarios   |   Etiquetas: Al rojo vivo, la sexta, Paco Marhuenda

marhuendaPaco Marhuenda se está convirtiendo en la estrella de cualquier debate político que se precie en la televisión nacional. Pongas la cadena que pongas, a la hora que la pongas, allí está él con sus gafitas, sus pelitos pegados y su cara de no haber roto nunca un plato pero estar siempre presente cuando la vajilla cae estrepitosamente.

Marhuenda es ya un imprescindible en la discusión, un Personaje con mayúsculas que anima el debate mucho más por los resortes que logra activar a su alrededor que por sí mismo.

Dos cosas destacan especialmente en la personalidad televisiva del director de La Razón, dos cuestiones derivadas directamente de su pensamiento político, como es obvio, pero pido por favor a los lectores que hagan el esfuerzo de abstraerse de ellos, de interpretar si sus palabras van cargadas de razón o son una solemne memez y vean más allá,  observen el entorno y lo que provoca en términos de espectáculo televisivo.

Cuando empecé a ver que en Al Rojo Vivo contaban con alguien como Paco Marhuenda de forma habitual en sus debates me llamó la atención, sobre todo por esa etiqueta que acostumbramos a poner a cadenas, programas y presentadores, etiqueta que en este caso era claramente sectaria y partidista, una que hacía pensar que en ese programa todos los participantes eran claramente tendenciosos, escorados a la izquierda y profundamente anti-PP. La sorpresa para muchos fue encontrarse un programa en muchos momentos equilibrado, sin olvidar lo que es una realidad muy legítima, la de una línea editorial concreta que reconocemos en muchos de los programas de La Sexta y que, sin embargo, parecía ser incompatible con la presencia de ciertos totems periodísticos de la derecha. Sin embargo, ahí estaba Paco cada semana, haciendo su papel y defendiendo sus ideas contra viento y marea. Al principio llama la atención, luego se convierte en un punto a favor de la pluralidad del programa y finalmente termina por hacerme pensar si se tratará de un infiltrado o de una utilización muy inteligente del personaje para rebatir sus ideas con sus propios argumentos.

En ese pensamiento andaba yo desde hace semanas cuando me he dado cuenta de otro interesante efecto-Marhuenda: su capacidad para sacar de quicio a sus compañeros de mesa sin levantar la voz y casi sin despeinarse, solo con soltar dos o tres argumentos como quién avisa de que sale a comprar el pan, es capaz de electrificar al más comedido de los periodistas pro-izquierdistas y no digamos ya a alguna exaltada representante de IU, a los que logra hacer perder la razón a base de provocar que le insulten, le griten y, también he de decirlo, incomoden a parte de la audiencia con la tensión que traspasa la pantalla. Mientras tanto, Paquito sigue con su tono de voz inalterable, pidiendo respeto y soltando alguna perlita que solo por el tono de voz puede llegar a pasar desapercibida, pero que irrita aún más a quién tiene enfrente.

La televisión de hoy en día está plagada de tertulias que se basan en juntar a un montón de personas con ideas diferente haciendo corrillos para defender lo suyo: hay tertulias deportivas donde madridistas y barcelonistas se tiran de los pelos, tertulias del corazón donde todos tiran piedras a todos y las políticas, donde derecha e izquierda siguen pensando que las ideologías han de ser blancas o negras y se enfrentan por unos principios que cada vez son más solapables. En todas ellas lo importante ha dejado de ser el contenido y lo fundamental son las estrellas mediáticas que se crean, sea por la aceptación popular o por el rechazo que provocan, entre sus compañeros y la audiencia. Ser capaz de captar toda esa afectividad o animosidad es clave para el ritmo televisivo y el espectáculo y hay que reconocerlo, Paco Marhuenda es ya uno de esos elementos, como Kiko Matamoros o Siro López.

    Compártelo...



Entradas relacionadas

¿Periodismo sin preguntas es periodismo?
octubre 31, 2016

El sábado por la mañana, como un episodio más de esta entretenida serie que se llama España sin Gobierno y que, entre...


La Sexta estaba ahí
septiembre 29, 2016

La noticia relevante de las audiencias de ayer miércoles no fue tanto el paseo de La Voz en Telecinco, rozando el 30% de audiencia,...


Premios FesTVal 2015
septiembre 4, 2015

Un año más, y ya van siete, el FesTVal de Vitoria está demostrando que es la gran cita de las televisiones y los medios...



6 Comentarios

Manu3l

Hola Chica de la Tele
El Señor Marhuenda es toda una estrella y deja a diario -y por todas las cadenas- muestras de su valía. Uno de mis momentos Marhuenda favoritos esta en youtube, no tienes más que teclear Marhuenda objetivo… y veinte segundos de argumentario y flema en estado puro.
Un saludo.

chicadelatele

Lo mejor de esa afirmación es Cristina Pardo, que «intentaba» no reírse.

Manu

Yo creo que Marhuenda se ha convertido en el Pim Pam Pum de los debates algo así como el «alivio cómico» creo que lo llaman de las peliculas.

En un principio pense que solo era el alivio de la izquierda, pero ultimamente tb lo veo en debates de la derecha mediatica, aunque sigue igual aguantando todos los palos y bromas desde la otra parte, y es que parece que es el unico que defiende al gobierno en todos y cada uno de los frentes.

Pasaba igual en el TDT party cuando iba algun socialista a defender a ZP, pero ahora ese papel lo tiene que hacer él cn Rajoy.

Y el bien contento q está, ganando pasta, popularidad (buena o mala) y loss programas ganando audiencia y notoriedad.

Pero como tertuliano no vale un pimiento, aunque eso en una tertulia televisiva es lo de menos

John Constantine (@JohnConstantin1)

Hombre, yo creo que el problema de Marhuenda es que siendo en teoría un periodista, se ha convertido en un personaje. De moda en Tv. Pura y exactamente lo que fue en su momento el padre Apeles. Lo que dice también mucho de la valía profesional y ética del personaje.

Luego, que esté de invitado en todas las tertulias, pues habla a las claras del nivel de las tertulias de este páis. Informativo, nivel Cero. Como entretenimiento o jaula de grillos, pues muy bien.

Yo creo que el nivel del periodismo en TV de este país lo ha dejado muy claro el otro día Ana Pastor en su entrevista a Zapatero.

Si ese es el nivel de la considerada como una de las mejores periodistas de TV del país, pues nos podemos hacer una idea de como es el resto.

Warp

¿Al Rojo Vivo es un debate político?

Pensaba que era la versión aburrida de Sálvame y este señor de gafas una mezcla rancia de Coto Matamoros y Mila Santana, un vocero extremista sin más interés que incendiar las cosas.

Ver estos «debates» es una pérdida de tiempo absoluta. Y hoy vuelve Salvados.

Puaj.

josé

De los debates que supuestamente pretenden analizar la actualidad me interesa el nivel de conocimientos de los participantes, su honradez intelectual y sus modales. Lo de menos, el espectáculo televisivo y el nivel de audiencia que pueda proporcionar a la cadena. En el de La Sexta Noche observo una cada día más grave falta de imparcialidad. Un invitado con plaza fija, Francisco Marhuenda, se ha convertido en la estrella del programa …. porque no hay otro. Dirigir una empresa propiedad del mismo grupo que la cadena le da un interesado y parcial protagonismo que, en atención a su ideología de extrema derecha, nivel intelectual y zafias maneras, no le corresponde en absoluto. Sus continuas y permitidas provocaciones hacia el resto de los contertulios; sus groseras descalificaciones sin argumentos a personas e ideas que no sean de su devoción; sus constantes mentiras y medias verdades con las que poner cortinas de humo ante la criminalidad social del gobierno del PP, y ese trato de favor de mantener su imagen y sus gestos en tanto otros están en el uso de la palabra, solamente puede obedecer a un indisimulado interés del Grupo Planeta por añadir publicidad gratuita al director de un periódico titulado, a mayor provocación, «La Razón». Por este camino es de prever que el programa vaya decayendo. Mantener la insidia como bandera no es rentable a largo plazo.



  • Últimas Entradas

    • Las mujeres se hacen fuertes en las series
      mayo 30, 2018
    • ¿En qué están pensando algunos?
      marzo 12, 2018
    • ¿Cómo será la televisión en 2018?
      febrero 21, 2018
    • OT no mejoró mucho, pero nos conquistó a todos
      febrero 7, 2018
    • El fútbol es una ruina y la culpa es del Barça
      enero 29, 2018
  • Nuevos medios

    • Televisión global, eso que usas y no sabes que estás...
      enero 15, 2016
    • No es lo mismo estar muriendo que estar muerto
      julio 3, 2015
    • Saltar el contenido para ir directamente a los anuncios
      febrero 2, 2015
    • ¿Para que sirven Tumblr y Pinterest?
      mayo 21, 2014
    • Twitter no es un potenciador de audiencias
      mayo 6, 2014

  • Archivo


 
  • Nuevos medios

    • Televisión global, eso que usas y no sabes que estás...
      enero 15, 2016
    • No es lo mismo estar muriendo que estar muerto
      julio 3, 2015
    • Saltar el contenido para ir directamente a los anuncios
      febrero 2, 2015

  • España

    • ¿En qué están pensando algunos?
      marzo 12, 2018
    • OT no mejoró mucho, pero nos conquistó a todos
      febrero 7, 2018
    • El fútbol es una ruina y la culpa es del Barça
      enero 29, 2018

  • USA

    • Young Sheldon, buena acogida pero no es para mí
      septiembre 28, 2017
    • Amigos de la universidad: un cinco pelao.
      agosto 7, 2017
    • No, lo de Anatomía de Grey no va a ser un spin-off
      mayo 17, 2017

  • Archivo

  • Contacto